Cuando, al besar,
se tiene algo más que amor
en los labios,
algo menos que medias verdades,
parecido a excusas,
cubierto de inseguridades,
escondiendo miedos...
la saliva
se convierte en
ácido que corroe el
poco amor
que aún tenías
en la punta de la lengua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario